La casa de ejercicios de Celorio ha organizado por segundo año consecutivo una tanda de Ejercicios Espirituales en clave ecológica. Inocencio Martín SJ es el impulsor de esta iniciativa que va cuajando en este entorno maravilloso y único. José Ignacio García SJ y Félix Revilla SJ han guiado esta experiencia compartida con 18 participantes, dos jesuitas y el resto laicos. La mayoría padres y madres de familia pertenecientes al sector de Educación y CVX, ligados a los colegios de la Inmaculada de Gijón y San Ignacio de Oviedo. El resto de Valladolid, Bilbao y Madrid.
A lo largo de los días, entre el 21 y 27 de agosto, los ejercicios se desarrollan buscando paralelismos entre el libro de ejercicios y la encíclica Laudato Si’. No es difícil encontrar los puntos en común desde el Principio y Fundamento a la contemplación para alcanzar Amor. Eso hace que no tenga que haber líneas paralelas en la experiencia. Conceptos clave como «amar, hacer reverencia y servir», «usar de las cosas tanto cuanto» , «contemplativos en la acción», «presencia habitada y trabajada de Dios en las criaturas», “las dos banderas», las tres maneras de humildad, los binarios, la mirada de Jesús sobre el mundo y la historia y tantas otras, encuentran en la Laudato Sí un acomodo extraordinario y natural. También forma parte de la experiencia la posibilidad de compartir la vivencia personal y los trabajos en que cada uno desarrolla su actividad, junto con algo de formación a través de las «pláticas». Elena López, de la PAL de Valladolid que vivió la experiencia en Celorio, reconocía que completa la experiencia porque lo que parece que son temas diferentes en realidad uno y otro forman parte de la propia vida. “Muy rico y gratificante recibir de Félix y José Ignacio ese amor por la tierra y el mundo, por este regalo”.
La casa de ejercicios de Celorio va a seguir ofreciendo esta experiencia, donde también la presencia de algunos jesuitas jóvenes adultos es bienvenida. El grupo será siempre reducido en torno a las 20-22 personas. La cuarta preferencia apostólica de la Compañía nos pide un esfuerzo por tener una experiencia espiritual y mística de esta urgencia del mundo actual. El próximo año, Dios mediante, será a finales del mes de julio y Manolo Rodríguez Carrera SJ la persona responsable de reservar las plazas.